Y luego lo hacis el amor, no el sexo, sólo el amor.
Y con esto me refiero a los lentos besos en los labios, el
cuello, el estómago, la espalda, las mordiscos en los labios, las manos juntas
y los ojos en los ojos.
Me refiero a los abrazos tan fuerte como para
convertirse en uno, cuerpos y almas atrapadas que chocan,
ropa quitada como los miedos,
besos en las debilidades, en los signos de
una vida que hasta entonces había sido un poco equivocada. Me refiero a los dedos en los cuerpos, crear constelaciones, la inhalación de perfumes, corazones
latiendo juntos, que respiran que a la misma velocidad, y luego sonríen, sinceros después de un tiempo que no eran más.
Entonces haceis el amor sin verguenza, porque el
amor es arte, y vosotros, obras divinas ....
(Alda Merini)
No hay comentarios:
Publicar un comentario